jueves, 8 de noviembre de 2012

Últimamente escucho, en los kioskos y cafés, muchas tontás económicas. Simplezas bienintencionadas en las que todos caemos comparando la economía doméstica con la de un estado del bienestar. Me gustaría compartir con mis conocidos un pequeño croquis: Crisis y Gran Depresión a partir del año 29. Tras 3 años de dramas sociales, la situación clama justicia. En 1932, en Estados Unidos, Ferdinand Pecora, un hijo de emigrantes italianos que llegó a ser fiscal de Nueva York, es nombrado por el presidente Herbert Hoover para investigar la responsabilidad de los bancos en las causas de la crisis de 1929. Su informe fue abrumador: propone el término de “banksters” para calificar a los “banqueros gángsteres”. Sobre la base de ese informe, el presidente Franklin D. Roosevelt decidió proteger a los ciudadanos de los riesgos de la especulación. Sancionó a toda la banca imponiendo la “Glass-Steagal Act” y estableciendo una incompatibilidad entre dos tipos de actividades: los bancos de depósitos y los bancos de inversión. En 1999, la Glass-Steagal es revocada por las presiones liberales. Año 2008... Han pasado ya 4 años y ningún "Pecora" (valgan las diferencias entre las dos crisis). Qué gobiernos de la zona euro tomen decisiones semejantes, depende de la presión en la calle, que puede acabar consiguiendo lo que se propone(véase el tema desahucios: muchos jueces se han hecho sensibles al tema, y finalmente la casposa clase política PPSOE se sienta a hablar del tema); pues ya sabemos que el 1% seguirá aferrado con uñas y dientes a su sistema. Por eso mismo es tan necesario que todos dejemos diferencias a un lado y comencemos por salir a la calle, a exigir un cambio pacífica y firmemente. Ya puedes continuar viéndome desde tu sofá y seguir criticándome, que soy un borrego. http://internacional.elpais.com/internacional/imagenes/2012/11/07/album/1352318300_278816_1352318885_album_normal.jpg

2 comentarios:

Alba María dijo...

Creo que la indiferencia está ganando adeptos...

Maria dijo...

Hay que salir y protestar, sin duda alguna!
Saludos.